Yo, personalmente, no me he encontrado jamás en un lugar más deprimente. Y mira que el hospital y la morgue están a escasos metros de la oficina del INEM...
Primero tienes que hacer cola, porque si no te has levantado de la cama a las 5 de la madrugada y llegado a las 5 y 4 minutos a la puerta de tu oficina del paro, despídete de llegar temprano para la cena.
Ya han pasado 3 horas y los funcionarios empiezan a llegar al convento. Pero no lo olvidemos, son funcionarios, y que conste que meterme con ellos lo hago por pura envidia, nada más. Lo que iba diciendo son funcionarios, así que la puerta principal no es la que se abre, no, no, muy despacio, las luces de la gran sala despiertan de su letargo, las persianas dejan que algo de luz entre en los despachos de los jefes, pero no demasiada, porque la retina puede sufrir daños irreparables, claro está. Y en algún momento, entre el sueño y la morriña de llevar congelado más de 3 horas e intentado evitar la conversación con el parado (o futuro parado) precedente o posterior se oye el ruido mágico: una puerta hacia tus sueños, un lugar calentito donde poder sentarte y esperar lo que haga falta para que te dediquen una cara de asco mientras te hacen una entrevista de trabajo que sabes que va a ser 'de lo más fructífera' acompañada de otra cola más mientras esperas que te arreglen la paga que vas a cobrar mientras esperas que la entrevista 'fructifere'...
Dicho así casi parece idílico, pero una cosa os voy a decir: Nunca, jamás en mi vida me sentí tan insignificante y triste como la primera vez que entré en el garito y me trataron como si fuera la última basura de este universo.
Yo comprendo que los funcionarios que trabajan allí estén asqueados de la vida y también comprendo que no todo el mundo desea encontrar trabajo por ir a apuntarse a las listas del INEM, sin embargo hay gente que no hemos tenido otro remedio, debido a la situación 'algo complicada' que está pasando la economía mundial (no voy a cabrearme con éso hoy, ya habrá más días...), y que en lugar de ver la cara de amargado de alguien que está sentado en una mesa de oficina, sin deslomarse y con un trabajo fijo PARA TODA LA VIDA, nos gustaría que sin necesidad de aspavientos, el funcionario que nos atendiera nos mirara como si fueramos persona humanas, de ésas que no tienen su misma suerte y por esa misma razón han esperado a la intemperie para poder hacer dicha entrevista.
Evidentemente no todos los que están detrás de una mesa del INEM se comportan así, claro que no. Pero lo mío debe ser mala suerte... Otro día os lo cuento con más detalle, por hoy ya estoy bastante deprimido. Os dejo con un articulillo muy entretenido, ya vereis ya... Fijaros bien que merece la pena.
Artículo: Interesante medida para 'fomentar' el empleo... ¬¬
31.8.10
30.8.10
Echándole mucha cara!!!!
De repente me he despertado esta mañana y me he dado cuenta que la gente sabe mucho sobre cómo echarle morro al asunto (ya lo sabía de antes, pero hoy me he cabreado con la vida más de lo habitual...) y me he dicho: si todo el mundo le echa cara para aburrir, porqué yo no voy a hacerlo.
A aprtir de hoy, cara la que haga falta, morro el necesario y un poco más y mala uva (siempre sin faltar, que de educación a mi me enseñaron un porrón y medio...).
Ála, quién sabe 'onde' me va a llevar esto... A la vuelta de la esquina, un poco más allá de la panadería o a hacerme famoso... Si los Grandes Hermanos lo hacen y no saben hacer la O con un canuto, porque no puedo hacerme famoso yo, no?
A aprtir de hoy, cara la que haga falta, morro el necesario y un poco más y mala uva (siempre sin faltar, que de educación a mi me enseñaron un porrón y medio...).
Ála, quién sabe 'onde' me va a llevar esto... A la vuelta de la esquina, un poco más allá de la panadería o a hacerme famoso... Si los Grandes Hermanos lo hacen y no saben hacer la O con un canuto, porque no puedo hacerme famoso yo, no?
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